Cada vez que los veo, recapacito la decisión que tome de abandonarlos, desempolvo las alegrías, añorando la forma simple de divertirnos con un viejo balón; de un lado a otro, corría detrás del gato con el obstinado deseo de atraparlo para vencerlo. Fue maravilloso, pero no lo suficiente.
"Dichoso y enamorado de mi vida, escape del hogar de donde todos me querían".Pensaba en lo salvaje que podría convertirme, y si seguía la dirección de aspirar bocanadas de oxigeno nuevo, la hecatombe de mis reflexiones posaría en la biblia del titulo certero. "Verdad y Libertad".
En los primeros días de mi yo vagabundo, la suerte acompañaba mis caprichos brindándome que comer; el paladar fino que identificaba mi manera de ser, por lo menos se extravío a un quinto plano, y los platos mas comunes eran pedazos de pan con verduras agrias, típica mugre que los ancianos regaban en los basureros; sencillamente era un manjar, cuando no tienes alimentos para satisfacer tu sed, todo lo puede parecer. De a poco, mi valía se fue acrecentando entre rumores que se paseaban de boca en boca, entre perro y perros; se hablaba mucho de mi posible procedencia, pero sin lugar a dudas nunca encontrarían ninguna información concreta. Después de un tiempo, sin previo aviso, el pilar de mis ladridos, estaba forjando un pequeño imperio de perros débiles que querían protección, por ocasiones la idea de gobernar me mantuvo despierto, y es que era interesante ver como lo que yo decía o quería se cumplía, sin embargo, la sinceridad que me acompaña en cada viaje, me impide omitir la parte donde ordenaba robos atroces, pues es complicado sobrevivir con una manada de perros hambrientos que no saben empatizar con sentimientos humanos, y eso es para que te deprimas, se trata de intentar vivir, o morir, es de las cosas mas necesarias que estuve obligado a entender.
Un día, donde todo lo que el sol alumbraba se exaltaba en felicidad, los llamados subordinados mas fieles a mi, se sublevaron. Todo indicaba que la situación se interceptaría difícilmente. Uno a uno, empezaron a llegar los canes al el basurero de su majestad; los malditos habían preparado una reunión. Puedo lograr revivir ese momento, y percibirlo como el mas gracioso de mi vida hasta hoy.
Los revolucionarios descubrieron fotografías donde yo aparecía, por su puesto, muy guapo, con numeros equivalentes a recompensas enormes. La familia que deje en el pasado, esparcía mi imagen por todas partes con la intención de saber mi paradero.¡Que hermoso fue saberlo!
¡Pero que les pasa!. No es para tanto.Mi voz interior decía.
De repente, ladridos de envidia, desaprobación, dolor y repugnancia, se lanzaron como una tormenta sobre mi.
Mientras tanto yo no hacia otra cosa que sonreir, era un perro diferente otra vez; y rematando, tenia la plena seguridad de que jamas me iban atrapar. Nunca lo hicieron.
"Escapar y experimentar, hacen al maestro siempre y cuando se decida a actuar". Y aquí estoy, de nuevo, siendo un salvaje más civilizado. Huyendo como un sabio descarado. Hasta nunca señores, me retiro a emprender una aventura mas.
© Cristian Hernando Sanchez Pinzon, es el único y verdadero autor de, http://icogitatio.blogspot.com/
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